El Eje Cafetero se reconoce por ser un territorio principalmente cafetero de montañas empinadas y mucha riqueza natural. Este paisaje fue reconocido como patrimonio mundial por el Comité de patrimonio mundial de la Organización de las naciones unidas para la educación, la ciencia y la cultura. De allí nace el Café Paisaje Cafetero, un café de origen fuerte con notas de sabor a manzana verde, caramelo y cacao.